Un día en el mercado yo estaba frustrada con mi esposo. Estaba embarazada con mi primer bebe y mi esposo me dio $30 para comprar la comida y las cosas del hogar por toda una semana. Era todo lo que tenia en ese momento. Yo entre a ese mercado quejándome que no era suficiente, estaba enojada, frustrada, confundida y murmurando.
En medio de las frutas y los vegetales el Señor me hablo. Me dijo: Hija, en vez de quejarte por lo que no tienes, dad gracias por lo que tienes. Sus palabras derritieron todo pensamiento negativo que invadía mi mente. En ese momento me arrepentí de haberme quejado y por mi mala actitud y le di gracias a Dios por todo lo que tenia. Y le día gracias por el buen futuro que El nos tenia preparado.
Amigas, empece a ver todos los especiales. Me lleve cosas que estaban en oferta GRATIS! Dios me abrió los ojos y pude estirar esos $30 al máximo. Salí del mercado glorificando a Dios y con un gozo sublime de saber que El es mayor que todas las cosas que yo puedo tener o no tener! La próxima vez que sientas que no tienes suficiente y te quieres quejar...recuerda dar gracias por lo que SI tienes!
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:6,7